María Luisa Lizárraga fue una destacada pianista, orgullo Sinaloense, que fue homenajeada de manera póstuma el pasado 23 de junio en el Centro de Innovación y Educación con un recital que corrió a cargo del joven Daniel Salvador Flores López.

El evento se llevó a cabo en el Lobby principal del CIE, donde se encuentra ubicado un piano que perteneció a la señora María Luisa Lizárraga, y que fue donado al patronato de Impulsora de la Cultura y de las Artes (IMCA) IAP, por su hijo, Luis Javier Orozco Lizárraga. Actualmente el instrumento tiene ya un año en las instalaciones del Centro de Innovación y Educación y espera su lugar en el Teatro de la Ciudad de Los Mochis, actualmente en construcción.

Con este mismo instrumento, Flores López deleitó durante este recital a decenas de personas que disfrutaron de siete encantadoras piezas de piano, con las cuales el joven músico transmitió un ambiente cálido y armonioso.

Para Daniel Flores, el realizar este homenaje póstumo representó algo muy emotivo y digno de todo su respeto y admiración, ya que aprendió a tocar piano con un maestro al cual enseñó la propia María Luisa:

“Es algo que no sé cómo explicar, ella fue una grande en toda la extensión de la palabra, me siento muy contento y muy emocionado por este homenaje, el cual lo realizo con todo el respeto del mundo para ella, no sabría decirte como me siento en este momento”

María Luisa Lizárraga, se especializó en piano y orquesta de cámara, fue profesora fundadora de la Escuela Superior de Música y Danza de Monterrey, cursó maestría y otros estudios en Bélgica, Francia, Italia y Australia, y ejerció como directora nacional de música en el INBA, hoy coordinación nacional de música y ópera, de cuyo grupo de concertistas formó parte.

El homenaje póstumo a la pianista continuará el día 12 de Junio con Sergio Hugo Garzón Gastélum y finalizará el martes 16 de agosto dirigido por el maestro Kevin Algandar.